Tener dama de ventaja es en muchas ocasiones una ventaja definitiva, y en esta posición, correspondiente a la partida Pohle-Uschold (Bayern, 2001), no es una excepción. El reto es saber realizar la ventaja en victoria, y si es posible hacerlo en el número más preciso de jugadas sin dar opciones al rival, como hizo el conductor de piezas negras en esta partida.
Con una ingeniosa maniobra técnica las negras resolvieron de forma brillante a su favor esta posición que se produjo en la partida Averbakh- Kortschnoj (Yerevan, 1965).
Averbakh, Yuri L – Kortschnoj, Viktor (Yerevan, 1965)
Solución y partida
38… Tc4+ tras lo cual las blancas abandonaron ya que tras esta jugada no pueden impedir la coronación del peón negro de la columna h.
Efectivamente tras 39. Rd2 Tc1! y hagan lo que hagan las blancas el peón h es imparable 40. Cxc1 h2.
El sacrificio de pieza de las negras: 28… Cxh3, no parecía muy prometedor, pero la mala gestión de la impactante jugada hizo que las blancas jugasen de forma poco meditada 29.Txd3 con lo que se metieron, en tan solo dos jugadas, en una red de mate, que las negras supieron ejecutar eficazmente para hacerse con la victoria en esta posición, correspondiente a la partida Marco-Mieses (Monte Carlo, 1901).
Marco, Georg – Mieses, Jacques (Monte Carlo, 1901)